Vivimos en dos mundos completamente distintos. Solamente tenemos un conector... que se está apagando. Tú, vives en tu mundo. Tienes tus paisajes, tus habitantes, tu mar y tu cielo. Yo, al igual que tú, tengo mi mundo. Pocas veces recorreremos las estrellas para visitar al otro.. pero, es así.
No estoy... triste, simplemente describo como es.
Hoy, esta noche, he estado a punto de alejar nuestros mundos años luz más lejos de lo que están ahora mismo. Pero no lo he hecho. Dejé esa decisión en manos del azar... y así seguirá durante algún tiempo.
Sigo pensando que todo se está enfriando. Mis paisajes, mi gente, mar y cielo están quedando sumidos a la más profunda oscuridad y al más intenso frío. Pero.. seguirá brotando un poco de luz. Allá en el rincón más íntimo de mi mundo, perdurará esa pequeña pizca de esperanza que siempre me ha acompañado durante todo este año. Es el motor de mi mundo, la energía.
No me gusta soñar qué habría pasado, de haber coincidido más, de haber podido intercambiar esas palabras contigo.. Porque sé que no es bueno que lo piense.. prefiero soñar otro tipo de cosas. Pero siempre reservo un espacio del sueño a imaginar cosas de ese tipo. Me.. estoy automutilando a mí mismo, por eso quería acabar con todo y gritarlo a los cuatro vientos. Pero no tengo el coraje y la garra necesarias para eso, no. Por eso no lo gritaré...
Pero sé que acabará sucediendo. Lo gritaré. Mis paisajes se calcinarán. Mis criaturas morirán. Mis mares se secarán y mis cielos se apagarán. Hasta entonces, prefiero seguir viviendo con una luz tenue. Una luz que me recuerde lo bello que era esta tierra. Una luz que me recuerda que, entre tanta oscuridad, siempre puede brotar un poco de esperanza. Una luz que nunca se consumirá. Love U.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario